22 de febrero de 2021

Baquetas para instrumentos Orff: Mi recomendación personal

A la hora de tocar instrumentos Orff las baquetas son mucho más importantes de lo que normalmente se piensa. No solo permiten sacar el sonido óptimo a cada instrumento (no más carillones taladrando oídos!), sino que hasta pueden ayudar a compensar un ensemble descompensado.

Después de muchos años de pruebas y demasiadas baquetas rotas esta es mi selección personal de baquetas para instrumentos Orff. Ahora mismo no uso otras, independientemente de la marca del instrumento. Unas baquetas buenas pueden hacer maravillas en un instrumento malo. Al lío!

Carillón soprano: Studio 49 GS o Studio 49 PKS 3
Carillón alto: Studio 49 PKS 3

Las baquetas PKS 3 valen tanto para los carillones altos como los sopranos y son especialmente recomendables cuando hay demasiados instrumentos. Son amables para los oídos y el bolsillo.

Las baquetas Studio 49 GS con cabeza de madera son las propias de los carillones sopranos y están bien para solos, pero pueden ser terribles si hay muchos carillones. La cabeza tiende a despegarse pero es fácil volver a pegarla. 

Xilófono soprano: Studio 49 S 5

Con cabeza de plástico y mango robusto, son duraderas. La única pega es que quizá a veces saquen un sonido demasiado fuerte. El modelo Studio 49 CS 5 es una alternativa más barata y ligera, que también puede servir.

 

 

Xilófono alto: Sonor SCH 50 

Son eternas. En 10 años no se ha roto ni una. Además, las prefiero antes que el modelo equivalente de Studio 49 (S 4) porque son cómodas para tocar con 4 baquetas, no se me clavan en los dedos las típicas muescas que tienen las otras en el mango.

 
 

Metalófono soprano: Studio 49 S 55

Siempre te pareció que los metalófonos sopranos sonaban demasiado poco? Pues la solución no son las baquetas de lana, ni las de fieltro, sino que las de plástico como estas.

 
 

 

Metalófono alto: Studio 49 S 7 
Xilófono bajo y Metalófono bajo: Studio 49 S 33 

Tanto unas como otras son resistentes y duraderas. En caso de necesidad se pueden usar las del alto en el bajo sin excesivos problemas.

 

 
 

Con el paso del tiempo mi criterio para comprar baquetas ha ido cambiando. De comprar las más baratas dentro de ciertas marcas, he pasado a no importarme en absoluto comprar cosas más caras.

Dentro de las baquetas de Studio 49, hay un modelo equivalente a varios de los escogidos en una gama inferior. Aunque sea tentador, son más baratas, no valen la pena.

Por qué? Tienen un mango muy endeble que en manos de niños en el mejor de los casos se doblan con facilidad y en el peor… rompen todas, especialmente las CS 7. No me queda ni una! Las CS 5 para xilófono soprano son las únicas salvables.

Con tanta baqueta diferente seguro que alguien se está preguntando: ¿y cómo sabe el alumnado qué baquetas lleva cada instrumento? Mi solución a este dilema es el panel del baquetas, del que ya hablé en otra entrada de este blog. Aquí tenéis una foto reciente:  

Y un consejo final. Si queréis que os duren las baquetas, recordad que hay que guardarlas en plano o colgadas de la cabeza. Lo de tenerlas en un bote en vertical es muy estético, pero poco recomendable. A la larga se doblan los mangos!!!! Y no queremos baquetas dobladas ni rotas. 

18 de febrero de 2021

Lecturas de introducción al Orff-Schulwerk

Comparto aquí este listado de lecturas recomendadas de introducción al Orff-Schulwerk en castellano e inglés que ya vió la luz en twitter en forma de hilo. Es una selección bibliográfica pensada para empezar a conocer sus ideas principales y además descubrir que esta metodología es mucho más que sus instrumentos.

Pero, ¡ojo! El mejor modo de conocer el Orff-Schulwerk es sin duda asistir a cursos. Sin discusión. Es difícil reflejar en los libros buena parte de las ideas y actividades que se desarrollan en las clases. Y mucho más entender su funcionamiento si nunca las has visto en la práctica o si partes de una educación musical conservadora. La sorpresa y el choque inicial suele ser bastante bestia para quienes nunca trabajaron así.

Así que estas lecturas serán más productivas si ya has asistido a un curso, porque reconocerás dinámicas y experiencias. En caso contrario, también se pueden leer, pero quizás te resulte más difícil visualizar como funciona todo. Ahora, al lío!

1. Los principios del Orff-Schulwerk 

Este artículo de Wolfgang Hartmann y Barbara Haselbach sintetiza las principales ideas del Orff-Schulwerk de una manera excelente. Mi referencia básica cada vez que necesito refrescar ideas.

2. Con el Orff en mi mochila 

Aunque suene un poco (mucho) a autobombo, en este mismo blog hay un artículo explicando los fundamentos del Orff-Schulwerk y otros en los que se puede ver su aplicación en diferentes propuestas didácticas. 

3. Textos sobre Teoría y Práctica del Orff-Schulwerk 

Una colección de textos de Orff, Keetman, Regner, Haselbach... describiendo los fundamentos de la metodología y sus orígenes. Son algunos de los más antiguos y fundamentales del Schulwerk. Esos a los que siempre se vuelve una y otra vez.

 

4. El secreto es la pasión. Reflexiones sobre educación musical. 

En este libro de Elisa Roche, una de las primeras españolas en pisar el Orff Institut, hay un capítulo titulado “Algunas reflexiones sobre la dimensión social del Orff-Schulwerk”. A parte de eso todo el libro es muy recomendable.

 

5. Revista Orff España 

La asociación Orff Spain publica una revista anual en la que se presentan diferentes artículos teóricos y prácticos sobre el Orff-Schulwerk. Todos los números se pueden leer en la web de la asociación. El único inconveniente es que solo están disponibles para los socios.

 

 

Inciso: Sigo ahora el listado con algunas lecturas en inglés, puesto que en español no hay mucho más destacable y en inglés hay cosas muy buenas para empezar.

6. Doug Goodkin: Play, Sing and Dance

Mi favorito de los textos de introducción, por su claridad de ideas y por explicar perfectamente toda la diversidad de facetas y campos de la educación musical que abarca el Orff-Schulwerk. Asequible para completos principiantes.

 

 

7. Orff-Schulwerk heute 

Orff-Schulwerk heute, antes llamada Orff-Schulwerk Informationen, es una revista bianual y bilingue inglés-alemán publicada por el International Orff-Schulwerk Forum Salzburg. Cada número incluye breves artículos en torno a un tema monográfico. Todos los números se pueden descargar gratis en la web del propio Forum. Además hay disponible un índice general de los números 1 a 82, que es muy útil para buscar artículos por temática o autor.

 
8. Orff Schulwerk Informationen: 50 Jahre Orff-Institut 

El número de la revista Orff-Schulwerk Informationen con motivo del 50 aniversario del Orff-Institut es un gran volumen bilingüe que realiza un repaso intensivo a la historia, los fundamentos de la metodología y sus campos de aplicación actual. Muy pero que muy recomendable. Se puede descargar aquí.

9. Gunild Keetman: Elementaria 

Es un texto fundamental del Orff-Schulwerk, muy rico en ideas prácticas, pero un tanto caótico en su estructura. No empezaría por este, pero puede ser una buena lectura más avanzada.

 

 

Y una propina en vídeo! 

10. Rob Amchin

En el canal de Youtube de Rob Amchin, recomiendo los vídeos de procesos, para ver cómo se trabaja con el material y se desarrolla una secuencia didáctica siguiendo las ideas del Orff-Schulwerk. 

15 de febrero de 2021

Recursos y materiales para hacer música en el aula ordinaria

Sin instrumentos, sin espacio, en el aula ordinaria, ¿cómo sobrevivir y hacer música cuando parece que no hay opciones? ¿porque realmente no las hay? ¿qué nos queda entonces? He aquí un listado de recursos y materiales para hacer música en el aula ordinaria y sobrevivir a un curso atípico.
 
Empecemos con algunas ideas. ¿Qué alternativas hay si no podemos usar instrumentos convencionales?
  • Voz y percusión corporal 
  • Percusión sobre mesas, sillas
  • Palillos chinos, baquetas, palos de helado 
  • Bolis, lápices, material escolar 
  • Platos de papel, vasos, botellas, cucharas de madera
  • Periódicos, bolsas de papel 
  • Cualquier objeto sonoro barato, que permita tener uno por estudiante
Con estas ideas en mente hay quien prepara lotes de materiales individuales, quien compra un mismo material para todos o quien como yo escoge algo diferente para cada curso. Incluso hay lotes a la venta, por ejemplo estos de EEUU: Music Kits
 
Ahora, al lío! Muchos libros del siguiente listado sirven completos tal cual son, otros requerirán algo de adaptación por vuestra parte y de algunos solo son interesantes algunos capítulos (en esta situación).
 
1. Kaboom Percussión: Play-alongs 
Entre sus muchos materiales, este dúo australiano ofrece tres volúmenes de acompañamientos rítmicos con percusión corporal u objetos sonoros, uno con piezas clásicas, otro con canciones pop y un último de villancicos. Ideal para todas las edades. Se pueden encontrar en su web.
 

2. Musication 
Por si alguien todavía no lo conoce, en este canal de Youtube hay un montón de vídeos para acompañar piezas conocidas con pequeña percusión o boomwhackers. 
 
3. Gunild Keetman: Rhythmische Übung 
Una joya desconocida de entre los volúmenes del Orff-Schulwerk repleta de pequeñas piezas de percusión corporal. Perfectas para instrumentar con lo que se tenga o usar como punto de partida para otras creaciones. 
 
4. Jim Solomon: The Body Rondo Book  
Una colección de rondós para percusión corporal de diferentes niveles de dificultad. Bueno, bonito, barato. 
 
5. Cualquier libro de Richard Filz 
Autor prolífico, cualquier obra suya servirá. Las hay más o menos específicas sobre percusión corporal, beatbox o percusión con objetos sonoros. Eso sí, no todas están en inglés! 

 
6. Doug Goodkin: Sound Ideas 
Aunque principalmente trate sobre la pequeña percusión, este libro funciona muy bien como compendio de ideas básicas para el trabajo rítmico con cualquier instrumental. Muy recomendable.
 
7. Orff-Schulwerk: Volumen I y V 
En el volumen I del Orff-Schulwerk se pueden encontrar ejemplos de recitados, ostinatos y piezas de percusión corporal de dificultad baja-intermedia. En el volumen V también hay piezas para percusión corporal, pero son mucho más complejas.
 
8. Gunild Keetman: Üb- und Spielstücke für Pauken 
En este suplemento del Schulwerk para timbales también se pueden encontrar piezas susceptibles de tocarse con percusión corporal o lo que sea. Pero puestos a escoger solo un material del Schulwerk me quedo con Rhythmische Übung. 
 
9. Shirley Salmon: Hello Children 
Una colección de canciones y juegos para niños (y no tan niños!). Lo más destacado del libro es la gran cantidad de ideas que ofrece para trabajar a partir de cada canción, entre las que siempre se encuentra algo útil. 

 
10. Doug Doodkin: Name Games / A Rhyme in Time 
Dos libros con ideas y más ideas para jugar con los nombres en clase y también una buena cantidad de ejemplos de trabajo con rimas. 
 
11. Hervé Tullet: ¡OH! Un libro con sonidos 
Un álbum ilustrado al que sacarle mucho partido para trabajar la expresión e improvisación vocal, las cualidades del sonido o la notación no convencional. En este blog ya hay un ejemplo de propuesta didáctica sobre este libro. 
 
12. Sofía López-Ibor: Blue is the sea 
Todo el libro es recomendable, pero para esta ocasión son especialmente interesantes los capítulos sobre el uso de periódicos en el aula, el de partituras gráficas y el de audición musical y artes plásticas. 
 
 
13. Fernando Palacios: Piezas gráficas para la educación musical 
Una colección de 26 piezas gráficas para interpretar con lo que se quiera y sorprenderse con el resultado. Está descatalogado pero se puede descargar en este enlace en la web del autor. 
 
14. R. Murray Schafer: Hacia una educación sonora 
Quizás sea el libro más desconocido de su autor, pero es el más útil. Incluye 100 actividades para escuchar y reflexionar sobre el sonido y el paisaje sonoro. Está descatalogadísimo pero a veces aún se encuentra algún PDF en la inmensidad de internet...
 
15. Anne Green Gilbert: Creative dance for all ages 
Casi 400 páginas con actividades de movimiento dan para mucho, también para encontrar ideas que se puedan realizar sin moverse del pupitre. Incluye un pequeño apartado de consejos para bailar en el aula ordinaria.  

 
 
 
 
La clave para poder bailar en estas circunstancias es tener repertorio (y en esta web lo hay) y modificar un poco las danzas para poder bailar en el sitio. En algunas ni falta hace…
 
 
Este post fue publicado originalmente como un hilo de Twitter en este enlace.
 

25 de marzo de 2020

La educación musical NO es esto


Señores, no, la educación musical no es eso. No al menos en mi aula, ni en la de muchos de mis compañeros docentes de música que, como yo, buscan cómo acercar la música y la danza de la manera más atractiva posible a los niños y jóvenes de este país en ese mísero espacio semanal que las leyes educativas nos dejan en las escuelas. 

La programación de esta mañana en ClanTV  y La2 de TVE podía haber sido una gran oportunidad para mostrar las toneladas de buenas prácticas que se ven en nuestras aulas, para dar una idea actualizada de la educación musical o para, por lo menos, ofrecer una mañana de práctica musical de calidad a todos los niños que llevan días encerrados en sus casas. Pero no lo fue. En absoluto. Desde el minuto cero en su lugar nos encontramos con un auténtico despropósito educativo.

La mañana comenzó con la franja de los pequeños de 6 a 8 años. ¿Y qué nos encontramos? Con un vídeo tras otro de solfeo. Posición de las notas en el pentagrama, tempos, negras, corcheas, blancas… Así durante toda la hora, con unas explicaciones abstractas propias del siglo XIX, unos ejemplos rítmicos mal secuenciados, hasta fuera de ritmo y con una calidad de vídeo lamentable. Pasó casi una hora sin que escucháramos ninguna música. No hubo ninguna referencia a la experiencia, a la práctica tan importante en esta etapa, más allá de hacer unos dictados completamente inapropiados. Y sobre todo era aburrido, muy aburrido. Me imagino a Orff, Kodaly y Dalcroze, entre otros pedagogos, revolviéndose en sus tumbas al ver semejante espectáculo.



Al ritmo que iban parecía que acabaríamos la mañana viendo todos los contenidos de grado elemental de conservatorio. Pero no, nos sorprendieron con algo peor. En cada nueva franja se repetían contenidos ya explicados en la anterior. Una y otra vez hablando de negras y corcheas. ¡Qué horror! Incluso hubo un vídeo repetido en espacio de 15 minutos.

¡Otra vez lo mismo!


A lo largo de la mañana las franjas también se completaron de manera variable con algún vídeo sobre instrumentos (con sonido MIDI!)  y otros de danzas para ver sin más. No había nada que hacer ni ofrecían ninguna explicación adicional. Especialmente llamativos eran el hecho de que los bailarines no eran de la misma edad que sus destinatarios y la absoluta falta de adecuación del repertorio a la edad. Puesto que era el día de Educación Artística y Educación Física ¿debemos suponer que las danzas también contaban como de Educación Física? ¿Era un dos por uno? 

Si con estos precedentes todos temíamos que la segunda parte de la mañana, la dedicada a la ESO, fuera otra tanda de solfeo e historia de la música, la realidad nos sorprendió: Yoga, ¡recetas de cocina!, todo con un estilo súper infantil y muy al final, un par de documentales sobre Pink Floyd y Tomatito de escaso interés, aunque al menos al fin vimos a alguien tocar un instrumento.

¿Desde cuándo la Educación Artística también son recetas?

No, señores, la educación musical no es esto. La educación musical es cantar, tocar, bailar, componer, improvisar, escuchar, hablar de música y ante todo sentir. No es aprender solfeo (ni siquiera puedo llamarlo lenguaje musical, porque el lenguaje musical es más atractivo que lo que hoy se vio). Cada vez somos más los docentes de música que reducimos a la mínima esencia los contenidos teóricos y siempre después de haberlo experimentado previamente. También es cierto que con el escaso tiempo del que disponemos es una cuestión de prioridades. Ya que tenemos poco tiempo, usémoslo bien, hagamos algo relevante y con lo que poder despertar la pasión por las artes. No hay que olvidar que para muchos, la materia de música será su única oportunidad en la vida de acercamiento a esta disciplina artística. 

Pero me temo que quienquiera que diseñara este despropósito no tiene ni idea de educación musical. Tampoco se preocupó de ser bien aconsejado, ni de rellenar con contenidos de calidad un espacio destinado a cubrir un servicio público de atención educativa a los estudiantes más desfavorecidos. Nada de eso. En su lugar optó por lo más fácil: coger sin criterio algunos vídeos de youtubers varios o de entre los materiales que ofrecen las editoriales junto con sus libros de texto. Libros de texto, por cierto, de los que muchos docentes de música ya huimos como de la peste, pues son nefastos y no comparten nuestros ideales de lo que la educación musical debería ser.

Los niños tocan en la tele, Munich, 1947.
En vez de este despropósito, lo ideal habría sido desarrollar nuevos materiales audiovisuales creados por pedagogos musicales que ofreciesen actividades prácticas musicales para hacer en casa. No es imposible, ya se ha hecho. Precisamente los orígenes de la metodología Orff-Schulwerk están intrínsecamente unidos a un programa de radio, después de televisión, en el que allá por el año 1947 los niños cantaban, tocaban y bailaban a ambos lados de la pantalla.

También es cierto, soy perfectamente consciente,  de la premura de esta situación excepcional. En ese caso, en vez de buscar material fuera, RTVE podría haber tirado de su propia hemeroteca, pues en ella hay recursos aprovechables, que podrían haber emitido esta mañana, por ejemplo:

- Capítulos sueltos de El Conciertazo, que si bien no era maravilloso, era mucho mejor que lo que vimos hoy y buscaba transmitir el gusto por la música.
- Apostaría lo que fuera a que entre la ingente cantidad de conciertos grabados de la Orquesta Sinfónica de Radio Televisión Española hay algún concierto para niños. Sino, pequeños fragmentos de conciertos con un repertorio apropiado también servirían.
- O de Los conciertos de Radio 3. ¿Por qué no un poco de jazz? ¿O de música tradicional?
- Para el alumnado de la ESO algún capítulo de This is Opera o This is Art, podría ser muy enriquecedor. 

Y esto solo por citar algunos ejemplos que se me ocurren a bote pronto, que seguro que en esa hemeroteca hay más conciertos, documentales o retransmisiones que podrían cumplir perfectamente esta función educativa. 

Ahora solo queda esperar a ver qué nos depara la semana próxima. ¿Volveremos a presenciar un espectáculo educativo bochornoso? ¿Habrá alguna mejora? Quién sabe. Mientras tanto, yo solo deseo profundamente que ninguno de mis alumnos haya visto esta mañana la tele. No quiero que piensen que la música es eso.